miércoles, 27 de diciembre de 2017

Parrandas navideñas

Hoy os voy a hablar de otra tradición muy arraigada en la Alpujarra, como son las parrandas. Esta tradición consiste en ir de casa en casa cantando y bailando, y la persona anfitriona ofrece comida a los invitados. Ahora os detallo como se hacen.

Parranda en Gádor, Acción por Almería


En los tiempos de navidad las personas se juntan y deciden ir de casa en casa,esta tradición se suele dar en los pueblos pequeños, cantando y bailando, las personas anfitrionas ofrecen comida y bebida por lo general, vino o anís. Estos anfitriones se van sumando a la gente que van en la parranda y van a otra casa y el proceso se vuelve a repetir.

Esta costumbre se solía hacer más antes, porque servía de método de distracción para las personas aunque hoy día se siguen haciendo sobre todo por recordarlo.
En estas reuniones se suelen cantar villancicos o música tradicional.

Por lo genera estas reuniones suelen durar toda la noche, pero antes podían durar de dos a tres días.

En pueblos como Alpujarra de la Sierra se pueden ver encuentros de este tipo.

Una de las coplas que se canta cuando se llega a las casas es:

A esta casa hemos llegado 
cuatrocientos en cuadrilla
si quieres que nos sentemos
saca cuatrocientas sillas

Ya sabéis que a mi me gusta poner un vídeo de cada uno de los temas que os propongo, así que ahí os lo dejo.


La matanza del cerdo

Hola, os voy a hablar en esta entrada de las matanzas del cerdo, una tradición que se mantiene viva en muchos sitios de España y sobre todo en la Alpujarra está muy arraigada.

La matanza del cerdo es un procedimiento habitual de sacrificio de uno o varios cerdos con el objetivo de aprovechar su carne y a menudo para proporcionar embutidos durante un año para la alimentación de una familia. Además manteca usada durante varios meses.


La matanza del cerdo; La Alpujarra llena de vida

Fases de la matanza

Hay que entender la matanza como un periodo largo, que comprende:
  • El engorde, desde la compra del cerdo y su cebado hasta el día de la matanza, donde se procede al sacrificado. Su duración depende de cuándo se compra el cerdo, aunque lo usual son 10 meses.
  • La matanza en sí, que suele durar dos o tres días.
  • El curado, dependiendo del uso que se haga de los productos, que puede durar desde días hasta varios años.

El día de la matanza

Los días previos

Los días anteriores a la matanza se celebraban reuniones familiares, habitualmente se invitaba a uno o dos vecinos expertos matarifes y se preparaban los instrumentos afilándolos, eligiéndose un día (generalmente por los mayores) que se previera sin lluvia, niebla, nieve o humedad (lo ideal era un día soleado con una buena helada matutina).


La matanza

El día de la matanza se desayuna una o dos horas antes de que amanezca.
La sesión comienza a la salida del sol. Junto con el matarife con su cuchillo se sitúan: quienes sujetan al animal con unas cuerdas; y varias mujeres y niños con cubos para recoger la sangre —que se empleará posteriormente en la elaboración de las morcillas  y usan cucharas para removerla para evitar que se cuaje.

Los embutidos secándose; La Alpujarra llena de Vida

La limpieza

 Una vez muerto el animal, se procede al despiece , quemando su superficie exterior; para ello se sitúa el cerdo en una cama de material combustible, que dependiendo de la zona estará compuesto por escobas,helechos o paja de cereal para eliminar el pelo de la piel; después, con la ayuda de un tipo especial de cuchillo, que está hecho totalmente de madera, se raspa la piel para desprender los restos de los pelos chamuscados y dejar la superficie perfectamente alisada.

A continuación se abre el cerdo y se retiran las vísceras por completo, recogiéndose cuidadosamente. Parte de ellas, sobre todo los intestinos y el estómago se reservan y se limpian de los contenidos que había dentro. Esta operación se realiza generalmente por las mujeres de la familia, que todas juntas se dirigen al arroyo más cercano y limpian en él toda la suciedad (hoy en día generalmente se limpian en casa, al disponer de agua corriente).


Las fases posteriores

La prueba veterinaria

Tras la muerte del animal se producía una división del trabajo en los elementos de la familia:
  • Los hombres limpiaban el cerdo y los instrumentos empleados, cuchillos, cubos, bancos, etc.
  • Las mujeres limpiaban el estómago y los intestinos del animal.
Se daba una muestra de diferentes partes de carne al veterinario de la comarca a primera hora de la mañana y éste daba su veredicto al mediodía. Si este era positivo, generalmente los niños asaban el rabo del cerdo y se lo comían.
Por la tarde se continuaba con la limpieza de vísceras, y algunos empezaban ya a embutir las morcillas y  picaban el pan o se cocía el arroz, las cebollas para las morcillas y se empezaban a cocer los primeros ejemplares. Si la gente estaba animada, por la noche se celebraba una fiesta en la que lo primero era probar la carne del cerdo.


Los chorizos y embutidos

El picado de la carne se realizaba el día después, ya que prácticamente la totalidad del cerdo se dejaba colgado de una viga, oreando, a resguardo de perros y alimañas, en la parte baja de un frío almacén bien ventilado durante la noche posterior a su sacrificio.
Por la mañana se comenzaba con el trabajo, utilizando cuchillería especial y muy diversos recipientes. Así, cortando y despiezando se van distribuyendo las partes del cerdo a diferentes especialistas: los que salan los jamones, los que pican, sazonaban y añadían el ajo para los chorizos, los que adoban el lomo, los que ponen en salazón el tocino y los que cocinaban los trozos restantes para la concurrencia de personas que trabajaban ese día.

La extracción de la grasa  tiene lugar en la tarde del segundo día, se meten los mantos de grasa en calderos al fuego y se funden; se extre el líquido en lebrillos de barro, empleadas posteriormente para hacer chicharrones o en la conservación de trozos de carne, chorizos o lomos. Parte de la grasa se emplea en la producción de jabón.
La operación de embutir los chorizos suele comenzar a partir del tercer día de matanza, y podía durar entre uno y dos días, dependiendo de la cantidad de carne disponible. Se emplea para ello una máquina especial que mediante presión introduce la carne picada en la tripa de cerdo.


Este es el proceso de una matanza de esta manera las familias se aseguran tener carne y embutidos todo el año y estas matanzas se suelen celebrar en los meses de diciembre y enero.

Embutiendo; La Alpujarra llena de Vida


Os dejo un reportaje que hizo Televisión Española sobre esta tradición.

Un día de matanza, RTVE

Si vais algún día en estas fechas por algún pueblo de la Alpujarra, veréis como se celebra esta tradición que lleva haciéndose muchos años y la tradición se pasa de generación en generación.

 

Elaboración de mantecados caseros

Hola a todos, ya estamos en plenas fechas navideñas y os voy a mostrar como se hace uno de los dulces más típico de estas fechas como son, los mantecados. Al tener esta receta, podréis hacerlos de forma casera y más natural.

Mantecados caseros, Pequerecetas.com


 Ingredientes:

 -250g de harina
 -150g de azúcar
 -175g de manteca de cerdo
 -2 yemas
 -1 cucharadita de canela
 -semillas de sésamo o ajonjolí.


 Elaboración: 

  Mezclamos la manteca con el azúcar y batimos hasta que se integren bien. Incorporamos la canela y batimos de nuevo. Con el horno a 100ºC extendemos la harina en una bandeja de horno con papel encerado, y dejamos que la harina se seque sin llegar a tostarse. Veréis que la harina no cambia de color aunque sí queda suelta. Una vez fría la incorporamos a la mezcla de manteca y amasamos hasta que queden integrados los ingredientes. Hacemos un volcán e incorporamos las yemas de huevo una a una, trabajando de nuevo hasta que la masa quede homogénea. Ponemos la masa sobre una superficie enharinada y trabajamos la masa con el rodillo, estirándola y dejando un grosor de un dedo aproximadamente. Con un cortador de galletas o un vaso cortamos la masa, dándole una forma redonda (o la que más os guste, podéis utilizar cortadores de galletas de diferentes formas). Cogemos la masa y la pasamos por un plato de semillas de sesamo sin tostar o de ajonjolí, y las colocamos sobre la bandeja del horno que habremos forrado previamente con papel encerado. Precalentamos el horno a 180ºC y horneamos durante 15-20 minutos hasta que cojan un color tostado. Una vez fríos podemos envolver individualmente en papel de seda o en un recipiente hermético, donde los podréis conservar sin problema.


 Os dejo un vídeo para que sea más visual y entendáis mejor como se hacen.



Espero que os haya gustado y que los hagáis porque de verdad merecen la pena. 

Localización

Hola a todos, vamos a empezar a conocer esta maravillosa tierra de la sierra almeriense y granadina.  Os voy a contar muy resumidamente ...